La alimentación durante la Navidad y el Fin de Año es un elemento central de las celebraciones, en las cuales las tradiciones culinarias adquieren especial relevancia en diversos países. Estos festivos se caracterizan por la abundancia de platos tradicionales, que no solo nutren el cuerpo, sino que también representan el espíritu de la temporada y fomentan la unión familiar. 

En la víspera de Navidad, las mesas se colman de manjares que varían según la región, pero siempre comparten la generosidad y el sabor. En muchos lugares, el pavo o el cordero asado son los protagonistas, acompañados de guarniciones como puré de papas, ensaladas y vegetales. 

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Más allá de los platos tradicionales, la Navidad y el Fin de Año son momentos para compartir, disfrutar y, en muchos casos, recordar a los seres queridos ausentes. Las cenas y almuerzos se prolongan durante horas, acompañados de risas, anécdotas y brindis con vino, champán o algún licor tradicional. 

El aumento del consumo de ciertos alimentos en estas celebraciones puede tener efectos indeseados, como el incremento de peso, que podría mantenerse a largo plazo y afectar la salud. 

El Dr. Nataniel Viuniski, médico especialista en nutrición y miembro del Consejo Consultor de Nutrición de Herbalife, advierte sobre los posibles impactos de la ganancia de peso durante las fiestas. 

"El aumento de peso durante estas fechas podría mantenerse con el tiempo. Si el peso corporal sigue subiendo a largo plazo, esto puede afectar otros aspectos de la salud, como la presión arterial, los niveles de azúcar en sangre y aumentar el riesgo de enfermedades cardiovasculares", señala el experto. 

En este contexto, es fundamental ser conscientes de las elecciones alimentarias y optar por opciones que favorezcan la salud a largo plazo. El Dr. Viuniski sugiere incluir ciertos alimentos en las celebraciones de fin de año que, además de ser deliciosos, aportan nutrientes esenciales y promueven el bienestar general. 

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• Frutas frescas: Son ricas en vitaminas, minerales y antioxidantes, lo que ayuda a fortalecer el sistema inmunológico y a mejorar la salud digestiva. Además, controlan el apetito de manera natural. 
• Verduras de hojas verdes: Espinacas, acelgas y rúcula son excelentes fuentes de fibra y micronutrientes que favorecen una digestión saludable. Son ideales para equilibrar las comidas más pesadas de la temporada, ya que aportan pocas calorías y generan una gran sensación de saciedad. 
• Frutos secos: Las nueces, almendras y avellanas son ricos en grasas saludables y proteínas, lo que contribuye a mantenernos satisfechos por más tiempo. Consumidos con moderación, son beneficiosos para la salud cardiovascular. 
• Pescados grasos: El salmón y el atún son fuentes de ácidos grasos omega-3, esenciales para la salud del corazón y del cerebro. Incluir estos pescados en las celebraciones es una excelente manera de equilibrar las comidas más grasosas típicas de la época. 
• Bebidas a base de té verde y guaraná: Estas infusiones no solo aumentan la energía, sino que también promueven un estado más activo. 

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Como concluye el Dr. Viuniski, "las festividades no tienen que ser un obstáculo para nuestra salud. Si somos conscientes de nuestras elecciones alimentarias y nos enfocamos en opciones nutritivas, podemos disfrutar de las celebraciones sin comprometer nuestro bienestar". 

Mónica Lizette Castellanos Osorio

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