En Colombia, la Navidad es una de las festividades más significativas del año, marcada por tradiciones que unen a las familias y fortalecen el sentido de comunidad. Dentro de estas tradiciones, el buñuelo ocupa un lugar especial, convirtiéndose en un símbolo culinario que representa el calor del hogar y la alegría de las celebraciones decembrinas. 

El buñuelo, con su característica forma redonda y su textura crocante por fuera y esponjosa por dentro, es mucho más que un simple alimento. Es un elemento imprescindible en las mesas navideñas, acompañando las novenas de aguinaldos, las reuniones familiares y los encuentros con amigos.  

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Preparar buñuelos es una actividad que suele involucrar a varias generaciones, desde los más pequeños que ayudan a darles forma hasta los mayores que supervisan el proceso de fritura, creando así un espacio para compartir historias, risas y amor. 

Históricamente, el buñuelo tiene raíces en la cocina española, pero con el tiempo se ha adaptado al paladar colombiano, convirtiéndose en un ícono de la gastronomía local. Durante la época navideña, su presencia en los hogares y en las calles es un reflejo de la importancia de las tradiciones compartidas y del espíritu de generosidad que caracteriza a estas fiestas. 

Además, el buñuelo no está solo en la mesa. Suele acompañarse de otros clásicos navideños como la natilla y el manjar blanco, creando un plato lleno de sabores y texturas que deleitan a grandes y chicos por igual. Esta combinación de platos no solo satisface el apetito, sino que también refuerza el sentido de pertenencia y celebración colectiva. 

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Preparación 

Ingredientes: 

• 1 taza de harina de trigo 
• 1 huevo 
• 1/2 taza de leche 
• 1 cucharadita de polvo para hornear 
• 1 pizca de sal 
• 2 cucharadas de azúcar (opcional, si los prefieres dulces) 
• Aceite para freír 
• Azúcar glas o miel para decorar 

Preparación: 

1. Preparar la masa: En un recipiente, mezcla la harina, el polvo para hornear, la sal y el azúcar (si lo usas). 

2. Añade el huevo y la leche poco a poco mientras mezclas, hasta obtener una masa suave y homogénea. No debe quedar ni muy líquida ni muy espesa. 

3. Formar los buñuelos: Calienta suficiente aceite en una sartén profunda o en una olla. El aceite debe estar a temperatura media para que los buñuelos se cocinen uniformemente. 

Mónica Lizette Castellanos Osorio

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